Vivimos en tiempos convulsos, tiempos de ataques terroristas brutales, súbitos y masivos. También en tiempos de saturación de información a través de los diversos medios de comunicación y redes sociales. Tiempos en los que un ataque terrorista o cualquier otro acto violento y perverso puede verse prácticamente en directo en la otra punta del mundo.

En los pasados días hemos vuelto a vivir el horror muy de cerca debido a los ataques terroristas ocurridos en Barcelona. Estos han sido grabados por cientos de testigos y de nuevo, han sido retransmitidos tanto en redes sociales como en televisión. En este ataque en concreto, los cuerpos de seguridad y el mismo Ayuntamiento de Barcelona solicitó a la población que no se compartiera material audiovisual con imágenes explícitas en los distintos medios de comunicación, pero desgraciadamente, la petición ha sido infructuosa. El día posterior a los atentados algunos periódicos ponen imágenes explícitas de víctimas mortales y heridos. ¿Cómo es posible?

Este post lo voy a dedicar al proceso de victimización, a su conocimiento y sensibilización.

Antes de hablar de los procesos psicológicos hablaremos de algo más importante, RESPETO.

Respeto por las personas que desgraciadamente estaban en el lugar equivocado en el momento equivocado y resultaron heridas o muertas en Barcelona. Respeto por sus familiares y amigos. Ninguno de ellos está preparado para ver una avalancha descontrolada de imágenes.

Imágenes y videos que estarán en distintos medios y que se podrán compartir en cualquier momento y ser visibles para ellos.

Es importante también pensar que cualquiera de nosotros puede ser víctima de un atentado terrorista, y ¿nos gustaría vernos en imágenes malheridos? ¿Les gustaría a nuestros familiares que se publicaran tales imágenes? La respuesta es no. Y no hay nada más importante que respetar y cuidar a estas familias en momentos tan difíciles.

Estas personas son víctimas de hechos profundamente traumáticos, y especialmente, las víctimas de atentados terroristas se ven expuestas a procesos muy complejos en distintos niveles.

Los procesos de victimización hacen referencia al proceso que sigue una persona que ha sufrido un daño psicológico intenso ante situaciones traumáticas.

La victimización primaria deriva directamente del acto violento, en este caso, el ataque terrorista. La víctima sufrirá una pérdida de confianza en sí misma y en los demás, una sensación de indefensión y de pérdida de control sobre su vida, temor a perder su propia vida. Hay una ruptura total con la sensación de seguridad y de control que hace que pueda sentir que se desmorona la vida. Digamos que estos hechos afectan a 3 supuestos básicos de la vida: el mundo tiene un significado, el mundo es bueno y mi persona tiene un valor.

La victimización secundaria deriva de la relación que establece la víctima con el sistema jurídico-social-penal (sistema judicial, policía, servicios sociales, aseguradoras, etc.) Un mal funcionamiento de las instituciones puede agravar el malestar de estas personas.

Desde momentos después de los atentados las víctimas se ven inmersas en interrogatorios, ruedas de reconocimiento, identificación de sospechosos o de familiares, reconstrucción de los hechos, reconocimientos médicos… En cuestiones de terrorismo todos estos trámites son más complicados que ante otros hechos traumáticos y además son muy repetitivos.

Durante estos procesos puede ocurrir que la víctima se sienta doblemente herida; por un lado está la herida psicológica directamente producida por el ataque, por el otro está la herida social, ya que puede ocurrir que la persona no se sienta comprendida ni ayudada por su entorno.

Pongamos algunos ejemplos:

  1. La víctima de un atentado terrorista que está siendo valorada por un tribunal médico para determinar la cuantía económica de su ayuda social. Un médico forense debe buscar las pruebas de que la víctima lo ha sido realmente (en casos donde hay lesiones físicas puede ser más fácil, pero no cuando hay lesiones psíquicas) ¿Qué imagináis que siente esta persona?
  2. Imaginemos una situación: un herido en los ataques de Barcelona es dado de alta en los servicios médicos y al entrar en sus redes sociales para responder a las personas que se han interesado por su salud ve muchas publicaciones compartidas con contenido explícito del atentado.
  3. Un familiar de una víctima quiere retirar videos con imágenes explícitas de violencia de atentados de alguna plataforma por lo que tiene que solicitarlo a través de vías legales. ¿Por qué tiene que recurrir a esto si no se ha dado consentimiento alguno para subir ese video?

En el primer caso, son los propios procedimientos legales los generadores de victimización secundaria (necesarios en cualquier caso) pero en el segundo y tercero somos nosotros, la sociedad, que con nuestro mal uso de la información podemos perjudicar a personas en un momento de gran vulnerabilidad psíquica.

Por esto, enfatizar en nuestra responsabilidad en este sentido. Entendemos que movidos por el dolor y el miedo podamos querer compartir toda información que llegue a nuestro poder pero es importante saber que podemos ayudar a las víctimas siendo respetuosos y no compartiendo sus momentos de dolor. #NoSeCompartenImágenesDeLasVíctimas.