¿Qué es la familia?

La familia  es un sistema de relaciones en constante movimiento, donde se ponen en juego los intereses, deseos, las normas, las conductas y los sentimientos de cada uno de sus miembros. La familia por definición es algo dinámico, no estático, es un viaje por los diferentes ciclos vitales y los acontecimientos que le suceden.

Sin embargo, hay veces que una familia parece que se para, pierde el movimiento. Si lo mirásemos desde fuera sería como un puzle encajado perfectamente, donde cada uno de sus piezas- miembros se acoplan generando una imagen estática. Cuando una familia se para, es cuando las dinámicas familiares no son constructivas,  a pesar de ser dañinas se mantienen, se repiten una y otra vez para mantener el statu quo.

¿Qué es secreto?

El secreto es algo oculto, lo no dicho. Forma parte de las dinámicas familiares, de hecho, casi todas las familias tienen un secreto, algunos más dañinos que otros.  Por eso es necesario aclarar que el concepto de secreto en sí mismo no es negativo. Un ejemplo de secreto sano sería aquel lenguaje inventado entre dos hermanos niños para que nadie más pueda entenderles, ya que ayuda a afianzar la relación entre ellos, o el secreto de una sorpresa entre los miembros de una familia con respecto a otro miembro porque el fin es positivo.

Sin embargo, los secretos familiares de los que queremos hablar son aquellos que paran a la familia, atrapan, generan angustia a aquel que lo sabe. Son una mochila pesada. Suelen ser los secretos en relación al origen y nacimiento, a la muerte, al trauma o abuso, a la economía familiar, la sexualidad, la enfermedad y lo religioso.

Pero ¿por qué se generan los secretos familiares? Por la necesidad de proteger la intimidad y la privacidad y para protegerse del enjuiciamiento social y de la vergüenza. Pero también porque los secretos generan jerarquías de poder en la familia y en ocasiones se convierten en herramientas de control sobre los otros.

En la trasmisión de los secretos familiares adquiere especial importancia la comunicación no verbal, porque es la vía de  comunicación de lo no dicho.

Un secreto compartido por varios miembros de la familia pesa menos que si el peso recae sobre un único miembro, pero todos los que comparten el secreto se ven atrapados en un círculo de lealtades.

Un secreto familiar es tóxico y dañino cuando atrapa y genera sufrimiento, cuando el secreto se mantiene en el tiempo y genera un desgaste emocional.

La enfermedad psicológica y los secretos familiares

Tal y como decía Françoise Dolto, “Lo que se calla la primera generación, la segunda lo lleva en el cuerpo”, porque la lealtad de los miembros por mantener un secreto familiar en muchas ocasiones pasa factura en alguno de  ellos. Se manifiesta a través de los miedos, las obsesiones, las somatizaciones, conductas disfuncionales y el aislamiento. 

La psicoterapia

Por eso cada uno de nosotros, como miembros de una familia, debemos saber que hemos crecido en un espacio psicológico compartido y formamos parte de una biografía transgeneracional, que no podemos eliminar pero sí recolocar y entender. Qué me está pasando aquí y ahora. Qué es de mi familia, qué se espera de mí y qué estoy poniendo yo.

El proceso de una psicoterapia lleva consigo el cambio para esa persona, pues el proceso de autoconocimiento lleva a despojarse de las maneras de vivir que hacen sufrir y a aprender a enfrentar la vida libre de conflictos. De esta manera, el cambio en uno de los miembros de una familia conlleva inevitablemente el movimiento de las piezas del puzle, pero la familia como un sistema vivo buscará de nuevo el equilibrio para sobrevivir.

 

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